martes, 31 de marzo de 2015

Las mejores sonrisas son las que nadie entiende...

Hoy me he despertado dormida, muy dormida, pero riéndome como prácticamente cada día. Y hace un momento pensaba en mi vida, con quién comparto mis alegrías y mis penas... y en este caso, las de quien también las sufre. Con quién discuto, con quién planeo y desplaneo, con quién improviso por las circunstancias del tiempo, porque el dichoso destino, o no, es caprichoso casi siempre.

Con quién compartir mi día a día es un regalo que me sigue llenando a diario. Pero sobre todo, con quién me río y a quien hago reír infinidad de veces. Y lo más divertido, sin duda, reírnos de nosotros mismos o incluso, reírnos de la sin razón, de esas cosas que no tienen sentido, de esa risa floja que no tiene explicación alguna más que la felicidad de pensar que la otra parte está sanamente loca... locamente cuerda.

Foto: Google Search

Y aunque los problemas existen, porque existen, nuestra propia existencia nos enseña que la vida es para vivirla, no para verla pasar, y que las risas, esas sonrisas exageradas transformadas en carcajadas... dan vida. Alimentan nuestra esencia para seguir sobreviviendo en una sociedad cada día más marchitada, más tóxica, más sin escrúpulos donde no nos queda más que ese ínfimo espacio entre dos personas llamado sonrisa.

Y estas risas tontas me han hecho recordar una reflexión personal que escribí hace un par de años que os dejo aquí mismo:

“¿No os habéis parado a pensar nunca que todas las modas pasan, el tiempo transcurre, los problemas se solucionan (de una forma u otra), que avanzamos hacia adelante porque ir hacia atrás no toca, que aprendemos a diario si estamos concienciados y predispuestos a ello…

...pero lo que jamás pasa de moda, ni el tiempo es capaz de borrar, lo que no es necesario solucionar porque no es un problema, que nos ayuda a ir hacia adelante con más alegría, y que la predisposición a regalarla nos hace más felices... es LA SONRISA? Yo sí, sé que LA SONRISA NUNCA PASA DE MODA."

Estoy de acuerdo, LAS MEJORES SONRISAS SON LAS QUE NADIE ENTIENDE. Incluso a veces, ni uno mismo... y doy fe de ello ;)




8 comentarios:

  1. Compartir la vida con alguien, a día de hoy, es muy complicado; creo que, cada vez menos, buscamos comprometernos y que en nuestra zona de confort se está muy bien. Así lo veo yo, Elia. Besos y cuídate. Te dejo esto, por si te interesa: http://www.ourgodsaredead.blogspot.com.es/2015/03/el-sistema-de-mario-conde-un-estudio.html

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Alex buenas noches.

      En primer lugar, cada persona es un mundo y no creo que se deba generalizar. En mi caso el compromiso es mutuo y muy bien entendido.
      En segundo lugar, ya hablé del concepto que tengo yo de la zona de confort mal entendida en mi anterior entrada. La dejo aquí para que no quede en el olvido: http://goo.gl/2NLxjf

      Y en tercer y último lugar, no entiendo qué tiene que ver el enlace que publicas en tu comentario con lo que estamos hablando en esta entrada sobre la sonrisa. Por favor, agradecería que editaras el comentario y eliminaras ese enlace que nada tiene que ver.

      Gracias y saludos. Que descanses.

      Eliminar
  2. Ese cartel lo subí yo hace unos años a la pagina de desmotivaciones. Fue un día que no saía por qué sonreía, pero no me importaba porque estaba feliz.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días.

      Disculpa, se quedó tu comentario sin publicar!! Pues muy acertado. A veces no es necesario tener motivos para sonreír. Sencillamente, hay que soinreír más a menudo. Sienta genial ;)

      Saludos!!

      Eliminar